Dogo Pudding: Un rincón retro y adorable en la famosa ciudad termal de Japón

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Dogo Pudding: Un rincón retro y adorable en la famosa ciudad termal de Japón

Un dulce imperdible para sumar a tu paseo por Dogo Onsen

Dogo Onsen, en la ciudad de Matsuyama (prefectura de Ehime), es conocido como el balneario más antiguo de Japón y atrae a muchos turistas. En el corazón de esta histórica ciudad termal, destaca una encantadora tienda de postres: Dogo Pudding.

Una tienda especializada en pudines con un estilo retro y adorable, perfecta para hacer una pausa dulce durante tu recorrido.

Dogo Pudding

Fachada de Dogo Pudding

Dogo Pudding es una tienda especializada en dulces como pudines, parfaits y baumkuchen. Su fachada con encanto retro inspirada en la era Taishō y su menú fotogénico la han hecho muy popular entre los viajeros.

Horario comercial
Días laborables 10:30 - 18:30
Sábados 10:00 - 20:00
Domingos 9:00 - 19:00
Festivos 9:30 - 19:30
Vacaciones regulares
Abierto todos los días
Número de teléfono
+081-89-993-8880
Sitio oficial
https://dogopurin.com/
Como visitar
A 2 minutos a pie desde la estación Dogo Onsen
Dirección
13 - 9 Dogo Yunomachi, Matsuyama, Ehime 790 - 0842, Japón

¡Difícil elegir! Postres que lucen increíbles en fotos

Cartel fuera de la tienda con una alineación de pudines adorables Vitrina llena de pudines coloridos

Al mirar la vitrina, verás pudines coloridos alineados uno tras otro. Además de los sabores clásicos, hay opciones de temporada, lo que hace difícil decidirse.

El “Set Irodori” y el “Set de pudines de temporada” son ideales para quienes quieren probar varios sabores en pequeñas porciones. También son perfectos para llevar o compartir.

Set Irodori Set de pudines de temporada

Además del pudín, también hay dulces variados como el “Parfait Especial de Dogo”, el “Pudding Baum” y el “Pudding Baumkuchen”, lo que te permite disfrutar del pudín en distintas presentaciones.

Parfait Especial de Dogo Mini Pudding Baum (5 piezas) Pudding Baumkuchen Menú de helados y parfaits (estilo pop) Menú en la ventana de pedidos

El producto estrella es el “Dogo Pudding”, que lleva el nombre de la tienda. Su aspecto en frasco es adorable, pero el contenido también sorprende.

Dogo Pudding Dogo Pudding (vista completa) Dogo Pudding (vista superior)

Al abrir el frasco, aparece una mandarina entera cultivada en Ehime. Su presencia sobre el pudín es tan impactante que sorprende a cualquiera.

El pudín, suave y de dulzura sutil, se combina a la perfección con la acidez refrescante del jugoso cítrico. Cada bocado ofrece una experiencia deliciosa y sorprendente.

Una gran mandarina dentro del pudín

Un postre local inolvidable que captura el encanto de Ehime en un solo frasco.

¡Ideal para amantes de los gatos! Un espacio interior lleno de diversión

En Dogo Pudding hay un área para comer en el lugar, donde puedes disfrutar los dulces recién comprados.

Zona para comer con ilustraciones de gatos Espacio para comer en el interior

Al entrar, lo primero que salta a la vista son las decoraciones con motivos de gatos. Las paredes, puertas y techos están llenos de ilustraciones felinas, creando un ambiente encantador como sacado de un cuento.

Pared con azulejos de colores Ilustraciones de gatos en la pared Puerta del personal decorada con gatos Ilustraciones de gatos cerca del techo Ilustración de un gato saltando hacia una mandarina Interior lleno de ilustraciones de gatos

Mientras te relajas con el sabor dulce del pudín, los adorables gatos dibujados en el local te harán sonreír. Es un espacio perfecto para descansar y disfrutar de un momento acogedor en medio del viaje.

Un momento “meloso” en esta ciudad termal que derrite el corazón

Fachada de Dogo Pudding

Un dulce premio después del baño termal: eso es Dogo Pudding.

Sus dulces encantadores y su interior lleno de motivos de gatos le dan un toque especial a tu viaje.

Dogo Pudding y una pared decorada con azulejos lindos

Déjate envolver por la atmósfera retro y adorable, y relájate con el dulzor del pudín.

Cuando visites Dogo Onsen, no olvides hacer una parada aquí y añadir un “momento que derrite” a tu rutina diaria.