Camina por la historia de la Restauración Meiji|El encanto del Santuario Terukunijinja en Kagoshima
En el corazón de la ciudad de Kagoshima, muy cerca del Observatorio Shiroyama y la estatua de Saigō Takamori, se encuentra el Santuario Terukunijinja.
Dedicado al señor feudal Shimazu Nariakira, este santuario honra a una figura visionaria que lideró la modernización de Japón y tuvo un papel fundamental en el nacimiento de la bandera nacional, el Hinomaru.
Dentro de su recinto se hallan monumentos que evocan la historia: el gran torii, la piedra conmemorativa del origen de la bandera y memoriales dedicados a los guerreros de la Guerra Boshin.
En este artículo descubrirás la belleza y el significado histórico del Santuario Terukunijinja, un lugar donde el espíritu de la Restauración Meiji sigue vivo.
Santuario Terukunijinja
El Santuario Terukunijinja, situado en el centro de Kagoshima, está consagrado a Shimazu Nariakira, el undécimo señor del dominio de Satsuma. Es reconocido por su papel en la modernización de Japón y por su estrecha relación con la creación de la bandera nacional.
Información básica del Santuario Terukunijinja
Elemento
Detalle
Deidad principal
Terukuni Daimyojin (Señor Shimazu Nariakira)
Horario de atención
9:00–16:30
Días de cierre
Abierto todo el año
Dirección
19 - 35 Terukunicho, Ciudad de Kagoshima, Kagoshima 892 - 0841
Descubriendo el santuario donde aún vibra el espíritu Meiji
En el recinto del Santuario Terukunijinja se encuentran el gran torii, la sala principal de oración, la estatua del señor Shimazu Nariakira y los monumentos dedicados a los caídos en la Guerra Boshin.
Es un lugar donde se puede sentir de manera tangible la historia de la modernización de Japón.
El imponente gran torii que domina la ciudad de Kagoshima
Al llegar al santuario, lo primero que llama la atención es su majestuoso torii de piedra.
Con una altura de unos 20 metros, puede verse claramente desde lejos. A pesar de estar en pleno centro urbano, su presencia es impactante.
Es uno de los torii más grandes de Kagoshima y es considerado un símbolo representativo del santuario.
Arquitectura tradicional y espacios dentro del recinto
Cerca de la entrada se encuentra una casa de descanso llamada “Kōzentei”, donde los visitantes pueden relajarse un momento.
El temizuya, la fuente para purificarse antes de la oración, presenta un canal de bambú por donde fluye el agua con serenidad.
También hay una pantalla táctil informativa donde se puede conocer más sobre la historia y los puntos de interés del santuario.
Más adelante se encuentra el shinmon (puerta sagrada), que da acceso al camino hacia la sala principal.
La sala principal, construida en madera y rodeada de grava blanca, destaca por su diseño ordenado y sereno.
El “Saikaku”: árbol sagrado con forma de ave
En el centro del santuario se encuentra un árbol podado con forma de ave, conocido como “Saikaku”, símbolo del Santuario Terukunijinja.
Al observarlo de cerca, sus ramas parecen las alas de una grulla a punto de volar.
Junto a él se erige la “Piedra de dedicación”, que explica que el árbol fue donado por el presidente de una empresa farmacéutica local en señal de gratitud.
Según la inscripción, el nombre “Saikaku” fue elegido mediante una convocatoria pública, y el árbol proviene de un ejemplar plantado en la época de Shimazu Nariakira.
Durante generaciones ha sido cuidado con devoción, reflejando la fe y el cariño de la comunidad local.
Linterna conmemorativa de la victoria en la guerra ruso-japonesa
Cerca del gran torii se encuentra la “Linterna conmemorativa de la victoria en la guerra ruso-japonesa”.
Fue construida para celebrar el fin del conflicto (1904–1905) y honrar a los soldados que regresaron victoriosos.
Su estructura de piedra y las inscripciones evocan los sentimientos de esperanza y gratitud de hace más de un siglo.
Hoy, aún permanece en silencio transmitiendo el mensaje de paz y memoria histórica.
Monumento al origen de la bandera japonesa
En una esquina del recinto se alza un monumento relacionado con el nacimiento de la bandera nacional japonesa, el Hinomaru.
Shimazu Nariakira, deidad principal del santuario, propuso al shogunato utilizar el sol naciente como emblema nacional durante el periodo Bakumatsu.
En 1853, sugirió izar el Hinomaru para distinguir los barcos japoneses de los extranjeros. Al año siguiente, el gobierno adoptó oficialmente su propuesta, convirtiendo al Hinomaru en símbolo de Japón.
El monumento conserva esta historia y recuerda la visión de un líder que marcó el rumbo del país.
Estatua del señor Shimazu Nariakira: el visionario de la modernización japonesa
Avanzando por el santuario aparece una estatua imponente del señor Shimazu Nariakira.
Como señor del dominio de Satsuma, fue pionero en la introducción de tecnología occidental, impulsando la construcción naval, la metalurgia y la educación.
También formó a grandes figuras como Saigō Takamori y Ōkubo Toshimichi, pilares de la Restauración Meiji.
A un lado de la estatua hay un panel informativo que detalla su vida y logros.
Defendía la idea de que Japón debía unirse para convertirse en un país fuerte y próspero. Bajo esa filosofía, desarrolló el “Proyecto Shuseikan”, considerado la base de la industria moderna japonesa.
Monumento conmemorativo de los guerreros de la Guerra Boshin
Junto a la estatua se encuentra el “Monumento a los Guerreros de la Guerra Boshin”, dedicado a los samuráis del dominio de Satsuma que participaron en el conflicto.
Allí se inscriben los nombres de los caídos, recordando su sacrificio durante esta guerra decisiva para la Restauración Meiji.
La Guerra Boshin (1868–1869) fue un conflicto civil entre el shogunato Tokugawa y el nuevo gobierno imperial. La victoria del nuevo régimen liderado por Satsuma marcó el fin del feudalismo y el inicio del Japón moderno.
Junto al monumento, un panel explica los detalles de su construcción.
Un sitio histórico imprescindible en Kagoshima
El Santuario Terukunijinja, dedicado a Shimazu Nariakira, es uno de los lugares más emblemáticos de Kagoshima y un sitio clave para comprender la historia de la modernización japonesa.
Se encuentra a poca distancia a pie del Observatorio Shiroyama, las ruinas del Castillo de Kagoshima y la estatua de Saigō Takamori, lo que lo convierte en una parada ideal dentro de un recorrido histórico.
Muchos visitantes disfrutan de un paseo desde el observatorio hasta el santuario, combinando historia, naturaleza y cultura en una sola ruta.
Con numerosos monumentos relacionados con la Restauración Meiji y el nacimiento de la bandera nacional, Terukunijinja es un lugar imperdible para quienes desean conectar con la historia viva de Japón.