El Mercado Hirome: Un lugar imprescindible en Kōchi
Cada vez que visito Kōchi, hay un lugar al que siempre regreso: el Mercado Hirome, ubicado en el corazón de la ciudad.
Bonito asado, sake local, voces alegres y un ambiente animado. Aunque es un destino turístico, el mercado se siente como una extensión natural de la vida diaria. Siempre ofrece una sensación reconfortante y familiar.
En este artículo comparto cómo paso un día típico en el Mercado Hirome, un lugar que he visitado una y otra vez. Espero que logres captar un poco de su esencia y atractivo.
Si buscas una guía general del Mercado Hirome, consulta el siguiente artículo.
El plato estrella: Bonito asado (Katsuo no Tataki)
Siempre empiezo mi recorrido en el Mercado Hirome pidiendo katsuo no tataki, bonito ligeramente asado. Cada puesto tiene su propio estilo, por lo que nunca me canso de probarlo.
Ese día lo acompañé con una cerveza. El bonito, asado a fuego de paja, desprende un delicioso aroma ahumado que armoniza perfectamente con las salsas y condimentos. Desde el primer bocado se siente el sabor auténtico de Kōchi.
No puede faltar el sake local
En Hiromeya también disfruté de platos pequeños como guisos y verduras cocidas. Todos estaban elaborados con ingredientes locales y preparados con esmero. No son ostentosos, pero su sabor reconforta.
Hiromeya ofrece las 18 variedades de sake de Tosa, por lo que es un lugar ideal para quienes desean degustar el sabor de la región.
Cada establecimiento tiene su propia personalidad, desde el tipo de cocina hasta la atmósfera. Puedes elegir quedarte en un solo lugar o recorrer varios y probar diferentes sabores. Ambas opciones son parte del encanto del mercado.
Compra, lleva y siéntate donde quieras: el estilo Hirome
En el Mercado Hirome, es común comprar comida en diferentes puestos y disfrutarla en las zonas comunes de comedor. Algunos locales tienen asientos, pero la mayoría son para llevar. Tú eliges dónde sentarte.
Cada espacio tiene su ambiente: el centro bullicioso, los pasillos laterales, las zonas tranquilas. Algunos aseguran asiento antes de pedir, otros caminan con su bandeja buscando lugar libre.
Algunos locales entregan la comida directamente, mientras que otros te dan un número y te la llevan a la mesa. Si es tu primera vez, no te preocupes: el personal te ayudará con gusto.
También puedes optar por sentarte en un local con mesas interiores si prefieres comer en un ambiente más tranquilo.
Combina lo que más se te antoje y disfruta donde te sientas cómodo. Así es la experiencia única del Mercado Hirome.
No te preocupes por recoger: un mercado cómodo y amable
En el Mercado Hirome no hace falta recoger los platos. El personal se encarga de retirar los utensilios y limpiar las mesas constantemente.
Esto no es común en establecimientos tipo patio de comidas. La limpieza y desinfección que realizan demuestra el compromiso del mercado con el bienestar de sus visitantes.
Puedes pedir en varios puestos y simplemente levantarte cuando termines. No tienes que devolver platos por separado, lo cual hace más cómodo disfrutar de múltiples sabores.
Gracias a este servicio, los siguientes comensales pueden usar los espacios con tranquilidad. Esa atención al detalle es parte fundamental del confort que ofrece este mercado.
Encuentros y conversaciones entre la multitud
El Mercado Hirome siempre está lleno de vida, de día o de noche. Puestos con platos frescos, risas alrededor de las mesas, el dialecto de Tosa flotando en el aire. Es un lugar donde el turismo y la vida cotidiana se mezclan de forma natural.
Al caminar, verás turistas decidiendo qué comer junto a clientes habituales con una cerveza en la mano. Más que un mercado, parece una pequeña ciudad.
No es raro empezar una conversación con quien se sienta a tu lado. Ese día, charlé un buen rato con un cliente habitual en la barra de Shuntaro.
Durante el almuerzo o la cena puede haber más gente, pero si vas un poco antes o después, puedes disfrutar de un ambiente más relajado.
Un lugar que representa el espíritu de Kōchi
El Mercado Hirome reúne a quienes buscan buena comida y a quienes desean pasar un rato agradable.
El bonito o el sake no son suficientes para describir su encanto. También lo hacen las conversaciones casuales, las interacciones con desconocidos. Son momentos simples que enriquecen el viaje.
Aunque es una atracción turística, el ambiente acogedor y cotidiano es lo que lo hace especial. Es un espacio donde puedes sentir la cultura de Kōchi y la calidez de su gente sin formalidades.
Cada vez que visito Kōchi, quiero volver a comer, hablar y reír aquí.
El Mercado Hirome es un lugar especial también para los viajeros, donde las experiencias con la comida y las personas están al alcance de todos. Te invito a que lo visites al menos una vez.