Ubicado en el sureste de Kioto, el monte Inari se alza majestuosamente, protegiendo los terrenos sagrados de Fushimi Inari Taisha. Este santuario icónico cautiva a viajeros de todo el mundo con sus hipnóticos túneles de puertas torii bermellón.
Al cruzar las vibrantes puertas torii, los visitantes entran en un reino diferente al mundo terrenal. Todo el monte Inari es considerado una zona sagrada, con numerosos lugares fascinantes dispersos desde la base hasta la cima.
Desde la magnífica Puerta Romon en la entrada, pasando por el majestuoso Salón Principal, hasta llegar a las mundialmente famosas Senbon Torii (Mil Puertas Torii), Fushimi Inari Taisha ofrece un sinfín de vistas impresionantes. Aquellos que se aventuren más allá encontrarán miradores panorámicos con vistas espectaculares de Kioto, piedras místicas que ponen a prueba los deseos y muchos otros rincones ocultos.
Esta guía te proporcionará toda la información esencial para visitar Fushimi Inari Taisha, incluyendo datos básicos, lugares poco conocidos y las mejores rutas para llegar a la cima. Ya sea que desees un paseo corto por el santuario y las puertas torii o un recorrido completo por la montaña sagrada, aquí encontrarás todo lo necesario para disfrutar al máximo de esta experiencia espiritual.
Fushimi Inari Taisha es el santuario principal de los aproximadamente 30,000 santuarios Inari que existen en todo Japón. Su impresionante pasillo de Senbon Torii (Mil Puertas Torii) lo ha convertido en uno de los destinos turísticos más famosos de Kioto, atrayendo a alrededor de 10 millones de visitantes cada año.
“Santuario Fushimi Inari” del Yodogawa Ryogan Ichiran, Volumen 4 (1860) – Fuente: Biblioteca y Archivos de la Prefectura de Kioto
Fushimi Inari Taisha se fundó en el año 711, lo que le otorga una historia de más de 1,300 años. Se cree que su fundador fue Hata no Iroko, un miembro del influyente clan Hata, un grupo inmigrante de origen asiático.
En aquella época, Japón estaba implementando el sistema legal Ritsuryō, y el desarrollo de la agricultura era una de las principales prioridades del gobierno. Según la leyenda, Hata no Iroko disparó una flecha contra un pastel de arroz en el monte Inari, y este se transformó milagrosamente en un pájaro blanco que voló hasta la cima de la montaña. Poco después, en el lugar donde aterrizó el ave, comenzaron a crecer campos de arroz. Este evento se interpretó como una señal divina y dio origen a la veneración de Inari como una deidad de la cosecha y la prosperidad.
El Shinsen Shōjiroku (Selección de Apellidos Nobles), un registro genealógico compilado en 814, menciona que el clan Hata descendía de Qin Shi Huang, el primer emperador de China. Se cree que este clan emigró a Japón a través de la península de Corea y desempeñó un papel crucial en el desarrollo del país, particularmente en la gestión financiera, la producción textil y la ingeniería fluvial. Gracias a su influencia, Fushimi Inari Taisha se convirtió en un centro de culto para la protección de la agricultura y el comercio.
Fotografía de Fushimi Inari Taisha por Kurokawa Suizan (1929) – Fuente: Biblioteca y Archivos de la Prefectura de Kioto
Aunque originalmente fue un santuario venerado por la nobleza y las familias influyentes, con el tiempo su fe se extendió al pueblo común. Durante el período Edo (1603-1868), los comerciantes y artesanos comenzaron a visitarlo con frecuencia para rezar por el éxito en sus negocios. Hoy en día, Fushimi Inari Taisha es uno de los destinos más visitados de Kioto, con aproximadamente 10 millones de visitantes al año.
Para comprender mejor los puntos más destacados de Fushimi Inari Taisha, es importante conocer su distribución general. Todo el monte Inari es considerado un área sagrada, lo que hace de este lugar un sitio de adoración único. La montaña en sí misma es un objeto de veneración y ha sido reverenciada durante siglos como un lugar de poder espiritual y divino. Debido a esto, los puntos de interés del santuario están dispersos desde la base hasta la cima del monte.
La estación más cercana es Inari Station en la línea JR Nara, situada justo frente a la gran puerta torii del santuario. Desde allí, los visitantes pasan por la Puerta Romon, llegan al Salón Principal, y finalmente alcanzan el mundialmente famoso pasillo de Senbon Torii (Mil Puertas Torii). Al atravesar este túnel de torii, se llega al Oku-no-sha (Santuario Interior), que marca el final del recorrido básico de la visita.
Más allá de este punto, el sendero que conduce a la cima del monte Inari es conocido como la Ruta de Peregrinación Oyama Meguri. Este camino tiene una longitud de aproximadamente 4 km y alcanza una altitud de 233 metros. El ascenso hasta la cima toma alrededor de una hora, mientras que la ruta de ida y vuelta suele tomar aproximadamente dos horas. Aunque el sendero está bien pavimentado, cuenta con numerosas pendientes y escaleras empinadas, por lo que puede resultar físicamente exigente. Si no estás seguro de tu resistencia, considera tomarte más tiempo y hacer descansos a lo largo del camino.
La mayoría de los visitantes optan por disfrutar de las Senbon Torii y visitar el Oku-no-sha, un recorrido de aproximadamente 10 minutos en cada dirección, antes de regresar. Sin embargo, para quienes deseen explorar más a fondo, la ruta Oyama Meguri ofrece impresionantes vistas panorámicas desde Yotsutsuji, tradicionales casas de té en el camino y una serie de santuarios ocultos que vale la pena descubrir.
A lo largo de esta guía, te presentaremos los mejores puntos de interés del santuario para que puedas disfrutar al máximo de tu visita a Fushimi Inari Taisha.
La Puerta Romon, que sirve como la entrada principal de Fushimi Inari Taisha, fue donada por Toyotomi Hideyoshi, uno de los señores de la guerra más poderosos de Japón en el siglo XVI. Se dice que Hideyoshi ofreció esta puerta en agradecimiento mientras oraba por la recuperación de su madre, Omandokoro, quien estaba enferma. Su estructura imponente y su vibrante color bermellón la convierten en un símbolo representativo del santuario.
Las columnas de la puerta están decoradas con intrincadas tallas y detalles ornamentales, reflejando el alto nivel de habilidad de los artesanos de la época. Al detenerte un momento a observar la puerta con detalle, podrás apreciar la impresionante artesanía y el profundo significado histórico que encierra.
El Salón Principal de Fushimi Inari Taisha es uno de los edificios arquitectónicos más impresionantes del santuario. Su vibrante estructura bermellón resalta intensamente entre la vegetación circundante, convirtiéndolo en un símbolo icónico del lugar.
Técnicamente, el edificio visible desde el frente es el Salón de Oración Interior, mientras que el verdadero Salón Principal se encuentra detrás de él.
Salón de oración interior (derecha) y Salón Principal (izquierda)
El Salón Principal, reconstruido en 1499, es un ejemplo representativo del estilo arquitectónico Inari-zukuri y ha sido designado como un Bien Cultural Importante. Su techo curvado y los detalles ornamentales cuidadosamente elaborados reflejan el alto nivel artístico de la época Muromachi.
Uno de los mayores atractivos de Fushimi Inari Taisha es el Senbon Torii (Mil Puertas Torii). Este espectacular túnel de puertas torii alineadas una tras otra crea un paisaje fascinante que atrae a visitantes de todo el mundo.
En la tradición japonesa, las puertas torii marcan la frontera entre el mundo terrenal y el reino sagrado de los dioses. Caminar a través del Senbon Torii se considera un acto de transición hacia un espacio divino.
La costumbre de donar puertas torii surgió como un gesto de agradecimiento cuando un deseo se hacía realidad. Esta práctica se popularizó durante el período Edo (1603-1868), cuando los comerciantes y familias comenzaron a ofrecer torii para pedir prosperidad en los negocios y seguridad en el hogar.
Hoy en día, la tradición de donar torii continúa, y el número de puertas ha crecido hasta alcanzar aproximadamente 10,000. La inmensa cantidad de torii es un testimonio del profundo vínculo de fe que une a los devotos con Fushimi Inari Taisha.
La tradición de donar puertas torii, iniciada en el período Edo, ha llevado a la impresionante formación de alrededor de 10,000 puertas torii. Este asombroso paisaje es una muestra de la importancia de Fushimi Inari Taisha como el centro de la fe Inari en Japón.
Después de atravesar las Senbon Torii, los visitantes llegan al Oku-no-sha (Santuario Interior), también conocido como el Oku-no-in.
Este santuario es especialmente conocido por atraer a personas que desean rezar por el éxito en sus metas personales. Aquí, los visitantes pueden escribir sus deseos en ema (tablillas votivas) con forma de zorro, y muchas de ellas incluyen dibujos de rostros de zorros, lo que añade un toque personal y creativo.
Dentro del recinto de Oku-no-sha se encuentra una famosa linterna de piedra conocida como la Piedra Omokaru. Se cree que al levantar esta piedra, uno puede determinar si su deseo se hará realidad, según la percepción del peso.
Muchos visitantes intentan esta prueba, lo que la convierte en uno de los atractivos más populares dentro de Fushimi Inari Taisha. Más allá del resultado, la experiencia brinda un momento de reflexión personal.
Más allá del Oku-no-sha, el sendero continúa a lo largo de la ruta de peregrinación Oyama Meguri, que rodea el monte Inari. Aquí comienza la verdadera peregrinación de montaña, llevando a los visitantes a lo más profundo del área sagrada.
Aunque el camino está bien mantenido, se vuelve más empinado con un mayor número de escalones después de la zona de Mitsutsuji (Tres Caminos). En este punto, muchos visitantes optan por dar la vuelta y regresar, mientras que aquellos que buscan una experiencia más completa siguen ascendiendo.
Si decides continuar más allá, se recomienda usar calzado cómodo y adecuado para caminar, ya que el terreno se vuelve más exigente.
Yotsutsuji es un mirador impresionante situado a una altitud de aproximadamente 200 metros. Desde aquí, los visitantes pueden disfrutar de una vista panorámica de la ciudad de Kioto, e incluso, en días despejados, es posible divisar Osaka en la distancia.
Este punto marca la mitad del recorrido de Oyama Meguri, por lo que es un lugar de descanso ideal para quienes están ascendiendo el monte Inari.
En Yotsutsuji, los visitantes pueden relajarse en la casa de té "Nishimura - tei", donde pueden disfrutar de la vista mientras toman un descanso del ascenso.
Una de las especialidades de este lugar es el Inari Sushi y el Kitsune Udon, ambos platillos simbólicos de Fushimi Inari Taisha. Además, el helado de kinako (harina de soja tostada) es un postre refrescante perfecto para recuperar energías tras la caminata.
Fuente: Nishimura - tei
Fuente: Nishimura - tei
Después de Yotsutsuji, el sendero continúa hasta la cima del monte Inari. Algunos visitantes deciden descender después de disfrutar la vista, mientras que otros optan por completar la peregrinación hasta la cima. La elección depende del estado físico y el tiempo disponible de cada persona.
Después de Yotsutsuji, el sendero empedrado sigue estando bien mantenido, pero la subida se vuelve más empinada a medida que los visitantes se acercan a la cima. El ascenso implica subir numerosas escaleras, por lo que puede resultar exigente para quienes no están acostumbrados a caminatas largas.
Sin embargo, esta parte del recorrido ofrece una atmósfera más tranquila y mística, con túneles interminables de torii bermellón y pequeños santuarios de piedra (otsuka) a lo largo del camino. Esta zona permite experimentar una conexión profunda con la espiritualidad tradicional japonesa.
El monte Inari cuenta con tres picos principales, cada uno considerado un sitio sagrado de adoración.
En la cima se encuentra el Ichinomine (Primer Pico), también conocido como Kamisha Shinseki (Sitio Sagrado del Santuario Superior), donde se venera a la deidad Suehiro Okami. Más adelante, se encuentra el Ninomine (Segundo Pico), otro punto sagrado. Finalmente, el Sannomine (Tercer Pico) alberga el Santuario Inferior, completando así el circuito de veneración de la montaña.
El término Shinseki (Sitio Sagrado) hace referencia a lugares donde se cree que residen los espíritus divinos, en lugar de estructuras de santuario convencionales. Por ejemplo, Kamisha Shinseki se refiere a una zona espiritualmente significativa en Ichinomine, en lugar de un santuario construido.
El recorrido estándar de la peregrinación Oyama Meguri sigue una ruta circular en sentido horario, pasando por Sannomine, Ninomine y finalmente alcanzando la cima en Ichinomine antes de descender.
Con una altitud de 233 metros, Ichinomine (Primer Pico) es el punto más alto del monte Inari y se considera el lugar de mayor poder espiritual dentro de la montaña. Se cree que quienes oran aquí tienen una mayor posibilidad de que sus deseos se cumplan.
En este pico se encuentra el santuario de Suehiro Okami, una deidad estrechamente relacionada con Ukanomitama-no-Okami, la deidad principal de Fushimi Inari Taisha. Como toda la montaña es considerada sagrada, cada pico es visto como un sitio donde residen los espíritus divinos.
Fushimi Inari Taisha ofrece una experiencia completamente diferente por la noche. Las puertas torii y las estructuras del santuario, que durante el día destacan por su intenso color bermellón, adquieren una aura mística y serena al anochecer.
La Puerta Romon, iluminada en la oscuridad, crea una presencia casi etérea. Además, las linternas de piedra dispersas por el recinto del santuario emiten una luz tenue, generando un ambiente pacífico y surrealista.
Las Senbon Torii también cambian radicalmente su apariencia por la noche. La suave iluminación de las linternas resalta tenuemente las innumerables puertas torii, haciendo que parezcan flotar en la oscuridad. Caminar por este sendero iluminado de manera sutil ofrece una sensación de estar ingresando a un reino sagrado fuera del tiempo.
Por la noche, la afluencia de turistas disminuye considerablemente, lo que permite disfrutar con mayor tranquilidad la atmósfera espiritual del santuario. Si prefieres una experiencia más íntima y serena, considera visitarlo después del atardecer.
Desde los infinitos pasillos bermellón de las Senbon Torii, hasta la mística atmósfera del monte Inari, pasando por las impresionantes vistas panorámicas de Kioto, la belleza de Fushimi Inari Taisha es difícil de describir con palabras. Con más de 1,300 años de historia, este sitio sagrado sigue siendo un lugar donde se entrelazan la fe, la cultura y la tradición japonesa.
Debido a su gran popularidad, el santuario puede estar bastante concurrido durante ciertas horas del día. Para aquellos que deseen experimentar la auténtica esencia espiritual de Fushimi Inari Taisha, se recomienda visitarlo temprano en la mañana, cuando la tranquilidad del lugar permite una conexión más profunda con su energía sagrada.
Fushimi Inari Taisha no solo es un destino muy apreciado por los turistas japoneses, sino que también ha sido reconocido como el sitio número uno que los visitantes extranjeros desean conocer en Japón. Esto demuestra que su combinación única de arquitectura impresionante, importancia espiritual y paisajes espectaculares lo convierten en una experiencia inolvidable.
Sin embargo, es importante recordar que este es un lugar sagrado de veneración, por lo que se debe mantener una actitud respetuosa y cumplir con las normas de etiqueta del santuario. Esto incluye llevarse la basura, no invadir propiedades privadas, y, sobre todo, mostrar consideración hacia otros visitantes. Fushimi Inari Taisha es un tesoro espiritual, y deseo que cada persona que lo visite, ya sea local o extranjera, pueda llevarse un recuerdo lleno de respeto y admiración.
Ahora que conoces más sobre Fushimi Inari Taisha, ¿qué recorrido te gustaría hacer? ¿Disfrutarás de las Senbon Torii y Oku-no-sha, o te aventurarás en la ruta completa hasta la cima del monte Inari?
Sea cual sea tu elección, este viaje sagrado será una experiencia inolvidable. Asegúrate de tomarte el tiempo suficiente para descubrir y disfrutar todas las maravillas que ofrece Fushimi Inari Taisha.
